En el culto a la Diosa Venezolana se encuentran representaciones donde es asimilada a una "mujer serpiente"
Foto : César Escalona
Foto : César Escalona
En el culto a la Reina María
Lionza, diversas historias refieren la relación de nuestra deidad indígena con
serpientes: La Diosa vive en un palacio subacuático en el que se transforma en
serpiente. La Reina recibe en su palacio a las visitas, las cuales deben
sentarse en boas enrolladas a modo de asientos, incluso Ella suele
representarse sentada sobre culebras. Don Cantalicio Mapanare (consorte de la
Reina) es dueño de bosques y la boa tragavenado (María Lionza) señora y dueña
de las aguas. La princesa Yara fue raptada por una anaconda enamorada, que,
como castigo de los genios del bosque, hicieron hinchar hasta reventar y morir,
transformando así a la joven en una Diosa de la naturaleza que está parada
sobre un pedestal de serpientes. En la popular escultura cabalga un danto
(tapir) que pisa unas serpientes como insignia de egoísmo y envidia.
La Diosa egipcia İsis con
cola de serpiente
Estatua votiva del
antiguo Egipto, circa 2 c. AD - en el Museo del Condado, Los Ángeles
Reseñamos parte del trabajo de Miranda Gray, que habla sobre la serpiente como un animal relacionado a la Diosa en su excelente obra Luna Roja: "En
algunas mitologías la serpiente encarnaba la fuente creadora que dio origen al
universo, y además se creía que transmitía su energía dinámica a la diosa que
simbolizaba tanto en el útero de la tierra como el poder que hacía crecer las
plantas.
Existen
muchas diosas relacionadas con serpientes, hecho que en algunos casos podría
indicar que al principio estas deidades reflejaban todo el ciclo lunar en vez
de la única fase con la que más adelante se las asoció. Hel, diosa teutona del
submundo y los muertos, era hermana de Ubobos, la serpiente que circundaba los
océanos de la tierra; las imágenes de Inanna e Isthar siempre estaban
acompañadas de serpientes, frecuentemente entrelazadas alrededor de una vara o
bastón, y a ambas se les conocía como la Reina de las Aguas Altas y Bajas; en
el santuario de Knossos, en Creta, se encontraron estatuas de diosas o
sacerdotisas con serpientes alrededor del cuerpo y en las manos; Hécate, la
deidad griega de la luna nueva, llevaba serpientes en el pelo, y a Deméter, diosa
del trigo, le custodiaba uno de estos animales.
La
asociación con las serpientes recaía en especial sobre las diosas patronas del
aprendizaje el oráculo la curación la sabiduría y la inspiración".
En la Montaña sagrada de la Diosa María Lionza, es representada como una mujer con cola de serpiente.
Foto: Miguel Moya
Foto: Miguel Moya
"En la
mitología y la leyenda las serpientes custodiaban el árbol de la vida. El árbol
como imagen de la diosa hizo posible la unión entre las entre la tierra, el
cielo y el submundo, y en consecuencia a través de él brotaron las energías de
la vida que se simbolizaban mediante la serpiente: ella era la savia ascendente
y descendente, el aspecto vital, mortal y renovador de la eterna fuente de la
vida. Las imágenes que aparecen en la historia de Adán y Eva son similares a
las de Mesopotamia, Egipto y otras culturas en las que se representaba lo
divino femenino; el ritmo con que cada año caen y vuelven a nacer las hojas del
árbol de la vida imitaba los ritmos de la serpiente la luna y la mujer, y era
una imagen del renacimiento que sigue a la muerte".
Antiguas diosas suelen
estar vinculadas a serpientes, nos referiremos en este caso a la Diosa Isis,
la cual como deidad protectora también
toma la forma de una cobra. Otras veces Ella y su hermana Nephthys se muestran
como dos cobras y reemplazan a Wadjet y Nekhebet como las Dos Damas de Egipto.
A veces es Isis-Thermuthis, una forma helenizada de Isis-Renenutet, protectora de las cosechas en forma de cobra. En la iconografía egipcia, las cobras se
encuentran comúnmente en el tocado de Isis, mientras que en Grecia e Italia,
Isis trae una cobra envuelta alrededor de su brazo.
En el período greco-romano, una Isis/Cobra está emparejada con su consorte Greco-egipcio Serapis (y a veces Osiris), considerados los protectores especiales de Alejandría.
Tenemos entonces que la serpiente es considerada como símbolo de sabiduría, fertilidad y protección desde tiempos remotos. Incluso en la biblia la serpiente aparece en diversos versículos como buena o mala:
En el antiguo testamento la serpiente habla a Eva para que cometa el primer pecado (Génesis 3:14)
Aarón convierte su vara en serpiente para demostrar el poder de Yahvéh ante Faraón (Éxodo 7:9)
Moisés elaboró una serpiente de cobre para curar a los israelitas del veneno (Números 21:9).
Jesús dice que hay que ser astutos como serpientes (Mateo 10:16) Y en el apocalipsis se llama al diablo "serpiente" y "dragón" (Apocalipsis 12:9).
Los autores de libros como el génesis buscaban relacionar a la serpiente con las religiones que convivían con los pueblos semitas, y para evitar que éstos dejaran de adorar al Dios de sus padres, hacían malas referencias de la serpiente como portadora de males, pues era símbolo de diversas diosas que pasarían ahora a ser identificadas con males y posteriormente con el diablo, idea que se popularizó entre nosotros.
En el período greco-romano, una Isis/Cobra está emparejada con su consorte Greco-egipcio Serapis (y a veces Osiris), considerados los protectores especiales de Alejandría.
Las imágenes de la Diosa representada como Cobra sagrada eran utilizadas antiguamente para repeler demonios
y pesadillas
Las serpientes
domésticas, además eran conocidas por ser las mensajeras de Isis.
Tenemos entonces que la serpiente es considerada como símbolo de sabiduría, fertilidad y protección desde tiempos remotos. Incluso en la biblia la serpiente aparece en diversos versículos como buena o mala:
En el antiguo testamento la serpiente habla a Eva para que cometa el primer pecado (Génesis 3:14)
Aarón convierte su vara en serpiente para demostrar el poder de Yahvéh ante Faraón (Éxodo 7:9)
Moisés elaboró una serpiente de cobre para curar a los israelitas del veneno (Números 21:9).
Jesús dice que hay que ser astutos como serpientes (Mateo 10:16) Y en el apocalipsis se llama al diablo "serpiente" y "dragón" (Apocalipsis 12:9).
Los autores de libros como el génesis buscaban relacionar a la serpiente con las religiones que convivían con los pueblos semitas, y para evitar que éstos dejaran de adorar al Dios de sus padres, hacían malas referencias de la serpiente como portadora de males, pues era símbolo de diversas diosas que pasarían ahora a ser identificadas con males y posteriormente con el diablo, idea que se popularizó entre nosotros.
- Conoce la leyenda de Don Cantalicio Mapanare haciendo clic AQUÍ
- Puedes leer también la labor de la sacerdotisa Beatriz Veit-Tané por el rescate de la Montaña Sagrada haciendo clic AQUÍ
- También te interese saber sobre el elemento fuego en el culto a la Diosa AQUI
- Conoce la relación de la mariposa en nuestro culto a la Diosa AQUÍ
No hay comentarios:
Publicar un comentario