jueves, 9 de abril de 2020

"Inconcebible que la Corte reivindique la Montaña de María Lionza"




DICE JUAN LISCANO:
Inconcebible que la Corte Reivindique la Montaña de María Lionza
Mientras permite que se roben las playas

La reciente decisión de la Corte Suprema de Justicia que reivindica para la Nación las tierras de Sorte y ordena la demolición de los numerosos templos que se han levantado en la montaña, en honor a la deidad aborigen María Lionza, Diosa de las aguas, ha producido diversas reacciones. Esa montaña declarado oficialmente Monumento Natural es en este momento objeto de apasionadas controversias.

Las sectas que tienen su asiento en la montaña de Sorte junto con los pequeños comerciantes que viven del flujo ininterrumpido de "peregrinos", repudian el fallo judicial del máximo tribunal alto tribunal de Justicia venezolano, mientras que Beatriz Veit-Tané, sacerdotisa del culto aborigen de María Lionza, la respalda plenamente, desde luego que con el interés de que le entreguen la montaña en exclusividad, lo que sugiere una división de sectas.

Es Igualmente interesante el hecho de que el problema salió de la órbita judicial y del interés sectario para tomar asiento en el Congreso Internacional de Sociología, que actualmente se reúne en Caraballeda, como inesperado huésped. A los sabios, dedicados al estudio del hombre desde nuestros antepasados primates hasta los hippies de hoy, y de sus relaciones y vida dentro del contexto social, llegó el problema creado por reivindicación de unos terrenos y su implicación en el culto a María Lionza a través de una declaración de la junta directiva del Colegio de Sociólogos y Antropólogos de Venezuela. 

En esa declaración la Directiva expresa su sorpresa y protesta en relación con la decisión de la Corte Suprema de Justicia, porque la considera atentatoria de la libertad de un culto de auténtica raigambre nacional y popular, que viene practicándose en esas tierras desde la colonia. 

Pero esa declaración encuentra reparos en el Jefe de la División de Antropología y Sociología de la Universidad Central de Venezuela, Mario Sanoja, y de la antropólogo investigadora Iraida Vargas. Por su parte el creador del Instituto de Investigaciones Folklóricas en Venezuela, escritor, poeta e intelectual, Juan Liscano, no suscribe totalmente la posición del mencionado Colegio y le hace serios reparos a la Corte Suprema de Justicia, porque le parece incongruente que se ocupe de los terrenos de María Lionza, donde se practica un culto, "mientras permite que se roben las playas, litorales y caminos pertenecientes a la nación y para el disfrute y servicio público".

El culto a María Lionza reúne elementos míticos de singular belleza y fuerza poética, que deben ser preservados de la mistificación de que están siendo objeto por el interés comercial. Aunque la vigencia de una religión no se puede establecer por el rechazo o aceptación oficial según el antropólogo y sociólogo Sanoja, "sino en lo que significa como verdad como concepción del mundo y de la existencia para una población dada". Es posible preservarla de influencias que no tiendan a enriquecerla sino a corromperla, porque el culto a María Lionza es en la actualidad la expresión de una forma religiosa ancestral que hunde sus raíces en la cultura aborigen, con la adopción de una serie de elementos y conceptos de la religión subyugante que se impuso durante la conquista y la colonización. 

A Juan Liscano le preocupa el hecho profundamente no solamente por sus implicaciones en el culto a María Lionza sino por lo que define como un acto  incomprensible de la justicia:
-Es absurdo incongruente e inconcebible que el más Alto Tribunal de la Justicia venezolana se ocupe de reivindicar para la nación los terrenos donde ha venido celebrándose desde antes del descubrimiento el culto a María Lionza, mientras permite que roben nuestras playas y litorales empresas nacionales y extranjeras, con el agravante de que son terrenos pertenecientes al Patrimonio Nacional para el uso y disfrute público y reservados a la Defensa Nacional .Margarita, Chichiriviche, Buche, Barlovento, Tucacas y tantos otros pueblos, sitios y lugares del país, perdieron sus playas o las están perdiendo ante la indiferencia de la Corte Suprema de Justicia lesiva a la Soberanía Nacional.

Lizcano observa que el culto a María Lionza ha sido afectado por la interferencia de una cantidad arborescente de sacerdotes y sacerdotisas que injertan una serie de elementos extraños. Hasta el punto de que se ha convertido en un aglutinante de las fuerzas mágico-religiosas de las Antillas, como los ritos de la santería cubana, y por ello está sometido a intensa complejización:

-La posesión, por ejemplo, no es original del culto. El culto a María Lionza es la manifestación popular que responde a la necesidad mística y mesiánica que no le puede ofrecer la iglesia en estos momentos, porque se ha convertido en una estructura de poder. Un estudio del culto Revela la riqueza religiosa y poética por su bellísima mitología. 

¿Hasta donde se enriquece o corrompe el culto? 
-Es una pregunta que se formula el mismo Lizcano para responderla en los siguientes términos:
- Los antropólogos son muy celosos de la preservación de estos hechos, pero no debemos olvidar que el pueblo es la vida la fuerza y la dinámica misma y su capacidad creadora es imponderable. Lo importante es que lo enriquezca el pueblo mismo. No que lo corrompan y degeneren agentes extraños como el turismo. 


El sociólogo y antropólogo Mario Sanoja hace el siguiente análisis del culto del que sale una respuesta a los problemas derivados de la decisión de la Corte Suprema de Justicia y del planteamiento de las directivas del Colegio de Sociólogos y Antropólogos:
-El culto a María Lionza es originalmente una religión de carácter naturalista o animista. Los seres sobrenaturales que constituyen el objeto del culto no se hayan ni en templos y altares, porque están en las diversas expresiones de la naturaleza como las aguas, los animales, los árboles, las frutas y las montañas. Se le rinde culto a los espíritus naturales sin pasar por las mistificaciones posteriores como altares, símbolos y templos. 

El problema actual tiene dos aspectos: El religioso y el judicial. Considero que la libertad de creer en un tipo de culto o religión determinada no puede ser coartada por ningún organismo, oficial o privado. En relación con el segundo aspecto, creo que la montaña de Sorte, dada su significación como monumento religioso, no pueden ser entregada a ninguna de las sectas, porque ello equivaldría a reconocer una en detrimento de otras. El problema es complejo, ya que afecta las creencias de un numeroso grupo de venezolanos de origen tanto rural como urbano, y no puede resolverse sin la presencia del antropólogo que estudie a fondo la estructura del fenómeno cultural para que surgiera las recomendaciones que sirvan de base a la formulación de una política adecuada.
Por último, espero que no se debe permitir la comercialización del culto, como aparentemente han pretendido algunos grupos de individuos, en favor de la preservación de la pureza de este importante fenómeno religioso.

Por su parte, la doctora Iraida Vargas, profesional que inscribe su nombre junto con el del doctor Mario Sanoja, a nivel de investigadores internacionales por sus trabajos arqueológicos en el Orinoco, aportó nuevos hechos al respecto:
-Tengo entendido que se trata de un problema reivindicatorio de tierras y me parece que la decisión judicial no es atentatoria contra libertad de cultos. Desconozco hasta el momento los estudios científicos sobre el tipo de actividades mágico-religioso en la montaña de Sorte, que puedan dar una valoración Real de lo que haya ocurre, con el objeto de establecer si se trata de una actividad sociológica o de un tipo de especulación comercial.
No sé en qué hechos científicos pudo apoyarse la directiva del Colegio de Sociólogos y Antropólogos para formular este planteamiento, porque podría ser entendido como un pronunciamiento a favor de un grupo determinado, cuando hay varios grupos en pugna por establecer un control sobre las actividades en la montaña.


"Está bien que caigan los templos"

Dice sacerdotisa de María Lionza 

  • Beatriz Veit-Tané aprueba la decisión de la Corte Suprema de reivindicar para la Nación la montaña de Sorte, pero pide se la entreguen para dedicarla al culto y al turismo


Beatriz Veit-Tané, sacerdotisa del culto aborigen de María Lionza respalda plenamente la sentencia de la Corte Suprema de Justicia, que reivindica para la Nación las tierras de la montaña de Sorte y ordena la demolición de los templos, pero aspira a que le entreguen a su secta el control de esa montaña, declarada Monumento Natural para practicar el culto e incrementar el turismo.

-Yo estoy de acuerdo con la decisión de la Corte Suprema de Justicia, porque esa "montaña magnética" es la morada de "La Reina" María Lionza, le pertenece a la Nación. Un pequeño grupo disidente, al que no reconozco, trató de apoderarse de ella, y de hacer daño al culto por las modificaciones que introdujo, particularmente las relacionadas con los ritos del cristianismo, que le son incompatibles, como lo es el que yo pueda entrar a una iglesia fumando tabaco y tocando la tambora como en un acto de exorcismo. Está bien que destruyan los templos, y yo puedo garantizar que "La Reina" no intervendrá en el problema porque ese es un pleito de humanos y su divinidad está por encima de esas cosas. Además la montaña debe ser cerrada mientras se le construyen instalaciones que puedan prestar servicios a más de 100,000 antes que van en cada semana santa.

La sacerdotisa no solamente se muestra de acuerdo con la decisión de la Alta Corte, sino que la interpreta a su favor porque ahora sí podrá solicitar su control para reglamentar el culto incrementar el turismo.
Beatriz es una sacerdotisa moderna que cree en los "tours " en la promoción y en los políticos. Por eso afirma que "este es el último gobierno que me ha protegido y aspiro a que resuelva definitivamente mi situación porque estoy cansada de pedir. Pienso dirigirme al Congreso y a las autoridades competentes, para que me sea entregada oficialmente la montaña de Sorte".

¿No cree usted que María Lionza haría esas gestiones mejor que usted?
-Maria Lionza Soy yo.

Esta transferencia de mito o realidad y viceversa, como en la antigüedad clásica, puede reflejarse molestamente en contra del doctor Pedro Colvery, Director de Recursos Naturales Renovables del Ministerio de Agricultura y Cría, por el enojo que expresa debido a que ha manifestado que no se puede entregar la montaña de Sorte en exclusividad a ningún culto, porque en Venezuela existe la libertad de cultos consagrada por la Constitución Nacional.

-Voy a declarar persona no grata al culto aborigen de Maria Lionza al doctor Clavery. 
¿Qué podrá pasarle entonces?
-Tal vez nada. No sé. Yo le entregó el caso Maria Lionza para que ella lo resuelva.
-Pero sí María Lionza es usted, como acaba de afirmarlo, se pueden anticipar los hechos.
-En este caso María Lionza es "La Reina"

Beatriz Veit-Tané, vuelve a ser sacerdotisa de María Lionza , quizás porque resulte menos comprometido que ser la deidad misma y dice adiós a la demagogia.
-Me despido de la demagogia. En las montañas de Sorte tuve que decir durante muchos años 4 barbaridades porque ellos necesitaban que yo las dijera, pero ahora no debo decirlas. Los problemas del país son grave, y me dedicaré a luchar para que sean resueltos.

FUENTE: El Nacional 27/11/1972 D/7

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